Si tú quisieras perdonarme, es lo que se me ocurre cuando te veo
caminando Cautivo ante un pueblo, que arde de fervor al verte pasar por San Sebastián.
Si tú quisieras perdonarme, es lo que te pido al verte por Huerta Mena, caído, soportando el peso del madero, cargado de mis pecados más
ocultos.
Si tú quisieras perdonarme, es lo que grito por dentro al verte
caminar por Tendaleras hacia el Calvario, lleno de dolor por el castigo injusto
de los que temieron al que solo vino a dar amor.
Y cuando te veo por la
Merced clavado en la cruz no puedo hacer otra cosa
El Corriente De Quinta
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